Verdes EQUO Puerto Real ha denunciado que el ayuntamiento de la localidad «incumple la ley en materia de residuos».
«La pasada semana el Ayuntamiento de Puerto Real anunció en redes que se iba a iniciar la implantación del quinto contenedor para la recogida de biorresiduos, como marca la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular. Pero hacia el final de la noticia se aclaraba que en un principio sólo se van a instalar 4 contenedores en la zona de Marina de la Bahía, para progresivamente hacerlo en el resto del municipio».
La formación indica que «desde el pasado 1 de julio el Ayuntamiento ya debería haber tenido implantada la totalidad del sistema, ya que la mencionada ley ponía el 30 de junio como fecha límite para hacerlo. Es síntoma de falta de planificación, ya que esto se sabía desde hace meses. Instalar solo cuatro contenedores con la entrada en vigor de la ley es del todo insuficiente. Además, colocarlos sin ningún sistema de control y sin que estén maduras las necesarias campañas de sensibilización que deben hacerse, puede provocar que el contenedor marrón se convierta en un contenedor gris más, con un porcentaje de impropios que haga inútil su implantación».
«En lo que a la mala gestión de este asunto se refiere, Puerto Real no es, sin embargo, una excepción ya que, como ha denunciado Ecologistas en Acción, el incumplimiento de la ley es generalizado en la provincia excepto en los municipios de la Sierra de Cádiz, donde están inmersos desde hace tiempo en el proyecto de economía circular, que está suponiendo un ahorro anual de 3,5 millones a estos ayuntamientos. Un claro ejemplo de que gestionar bien los residuos no es sólo una necesidad ambiental, sino también económica», señalan desde Verdes EQUO.
«Es importante señalar que la nueva ley de residuos impone obligatoriamente el Impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, con un importe de 40 € o 30 € por tonelada, en función de si se trata respectivamente de residuos directamente vertidos o con un tratamiento previo de separación. Esto para el municipio de Puerto Real va a suponer un coste anual que puede superar fácilmente el medio millón de euros. Eso sin contar lo que ya se paga a Biorreciclaje, la empresa que gestiona la planta de Miramundo, que se acerca al millón de euros».
«El argumento que se escucha alguna vez en la calle de que como ya pagamos una tasa no nos pueden obligar a reciclar es además de absurdo totalmente dañino para la ciudad. El tratamiento de un residuo separado es muchísimo más económico que gestionarlo todo mezclado. La buena gestión de los residuos debe ser una corresponsabilidad entre ciudadanía y administración. Y si la ciudadanía no cumple la gestión de los residuos será un auténtico sumidero de fondos públicos que podrían emplearse en otras de las muchas necesidades del Ayuntamiento, mientras que si la ciudadanía cumple en un futuro se podrían incluso ajustar las tasas, ya que la gestión de los residuos no solo costaría menos dinero sino que genera ingresos para la hacienda municipal. Pero para que la ciudadanía pueda contribuir es indispensable que el Ayuntamiento ponga a su disposición los medios necesarios. Y en esto está fallando el Ayuntamiento de Puerto Real. Ya sea al no implantar de manera completa el quinto contenedor o con él lamentable ejemplo del Punto Limpio de Casines, que lleva cerrado desde noviembre como desde Verdes Equo denunciamos hace ya tiempo«.
*Biorresiduo (definición de la nueva Ley de Residuos): residuo biodegradable vegetal de hogares, jardines, parques y del sector servicios, así como residuos alimentarios y de cocina procedentes de hogares, oficinas, restaurantes, mayoristas, comedores, servicios de restauración colectiva y establecimientos de consumo al por menor, entre otros, y residuos comparables procedentes de plantas de transformación de alimentos.
FUENTE: Verdes EQUO Puerto Real