Antonio Romero, Alcalde de Puerto Real, está acudiendo a las distintas Asambleas de Zona de Puerto Real para comentar la situación de la «Tasa de Transferencia, Transporte y Tratamiento de Residuos Municipales» que tiene que poner al cobro durante el presente año el Servicio de Recaudación de la Diputación de Cádiz a instancias del Consorcio Bahía de Cádiz, encargado de la empresa Biorreciclaje, que gestiona la planta de tratamiento de Miramundo, entre Medina-Sidonia y Puerto Real.
En la Asamblea de Zona celebrada en la AVV El Rosal del Meadero de la Reina, Romero presentó a través de un documento las diferentes tasas que existen al respecto. Una de ellas es el conocido comúnmente como «impuesto de basura», que cada puertorrealeño ya paga dentro del recibo del agua que pasa al cobro el Grupo Energético (GEN).
Este «impuesto de basuras» que ya se paga, sirve para que el camión de la basura pase a recoger los distintos residuos y los traslade hasta el centro de transferencia que se encuentra en Cádiz capital.
Y es aquí donde la población de a pie y comerciantes se encuentran con la temida «Tasa de Transferencia, Transporte y Tratamiento de Residuos Municipales», dado que esta cubre el traslado desde Cádiz hasta su tratamiento en la planta de Biorreciclaje en Miramundo. Un servicio, este último, que cuesta entre 800.000€ y 900.000€ al año, según explicó el propio Romero.
«Históricamente los Ayuntamientos han hecho frente a esta tasa», comentaba Romero, que recordó que, en 2012, el Ayuntamiento de Puerto Real aprobó una tasa integral que se ocupaba de llevar la basura hasta Miramundo, aunque esta acabó siendo derogada tras la aprobación de la tasa consorcial. Aquí, el Regidor puertorrealeño criticó que, una tasa que se aprobó -la de 2012- en Pleno, fuera «suspendida en el tiempo de forma indeterminada. Lo lógico es que si se aprueba en Pleno, que se necesite del mismo órgano para suspenderla».
Deuda desde 2017
Romero también comentó las gestiones municipales para efectuar el pago de la tasa hasta Diciembre de 2016, cuando se contaba con una deuda de 1,9 millones de euros al Consorcio Bahía de Cádiz por este servicio. Asimismo, el Primer Edil criticó que en la planta de Miramundo «no se presta el servicio. Allí no se recicla», antes de recordar que «esta tasa nos supone más de lo que nos costaría llevarla nosotros a Miramundo».
El Servicio de Recaudación de la Diputación de Cádiz pondrá al cobro este servicio desde Enero de 2017 hasta la actualidad, si bien ofrecerá facilidades de pago a todos los usuarios.
En este sentido, Romero quiso comentar que la intención del Consistorio sería la creación de una «Tasa Integral», que ya hacen otros Ayuntamientos como Cádiz, Rota, El Puerto de Santa María o Jerez de la Frontera, en la que se incluyera todo el servicio por parte del propio Ayuntamiento.
Planta de Reciclaje
Una alternativa lejana por la imposibilidad económica, sería que Puerto Real tuviera una propia planta de reciclaje. Una opción «que no es viable», en palabras del propio Romero. «No hay sensibilidad política en el sentido medioambiental», indicaba.
Si bien, el Consistorio estuvo valorando la opción de planta de reciclaje que existe en la localidad madrileña de Rivas-Vaciamadrid. «Un modelo potente y no», comentaba el Regidor, ya que desde el Equipo de Gobierno se apostaba más por la recogida selectiva que por el reciclado conjunto mediante productos naturales y el superior gasto de agua para ello.
Una opción, como indicó desde el principio, complicada, ya que la inversión también sería muy grande y necesitaría de varias poblaciones para poder amortizarla en casi una década.