La eurodiputada de Podemos Teresa Rodríguez ha mantenido este viernes un encuentro con el colectivo de extrabajadores de Delphi, con quienes se ha comprometido a indagar en la Comisión de seguimiento presupuestario de la Unión Europea (UE) sobre el uso de las ayudas comunitarias que se concedieron con motivo de la deslocalización en 2007 de la multinacional estadounidense de Puerto Real (Cádiz).
En declaraciones a Europa Press, Rodríguez ha explicado que la reunión se ha celebrado en el edificio de sindicatos de Cádiz, donde este colectivo mantiene un encierro desde hace 138 días. Los afectados han informado a la eurodiputada de que hay 600 familias que, siete años después, continúan pendientes de una solución.
Detalla que la reivindicación principal de los extrabajadores de Delphi es «el cumplimiento del acuerdo de recolocación» por parte de la Junta de Andalucía, aludiendo al mismo tiempo a una «mala gestión de las ayudas para la formación a lo largo de estos años».
Lamenta el colectivo que «no se haya reconocido aún el fracaso del plan de formación», argumentando que, de haber funcionado, no habría 600 personas sin recolocar. Igualmente, apuntan a otros fondos que se han «gestionado mal» a través, por ejemplo, de «proyectos que se han caído».
Los afectados por el cierre de Delphi han indicado a Rodríguez que parte de las ayudas venían de la Unión Europea –unos 10,4 millones–, por lo que le han trasladado la necesidad de que «supervisemos, a través de la comisión de seguimiento presupuestario de la UE, las ayudas que se habían destinado por la deslocalización de la empresa de la Bahía de Cádiz».
Apunta la eurodiputada que Podemos puede aportarles eso «desde ya», si bien la idea es sentarse más veces con el colectivo para conocer más en profundidad sus inquietudes, analizar las pruebas documentales existentes e informarse «a fondo» del conflicto, de los siete años de gestión de las ayudas y averiguar si ha habido «algún tipo de irregularidad», en cuyo caso exigirán la «depuración de responsabilidades».
Por último, los extrabajadores de Delphi le han informado de la «criminalización del colectivo» y de la «sensación de aislamiento» que tienen, ya que «no reciben información ni tienen intercomunicación directa con ninguno de los agentes del conflicto», lo que contribuye a la «desesperación» de cientos de familias que han sido ya «víctimas de desahucios» y que han tenido que recurrir a la solidaridad para sobrevivir.
Rodríguez se ha puesto «a disposición» del colectivo para lo que les pueda apoyar desde su posición en Europa y «contribuir a la búsqueda de soluciones».
Señala que la iniciativa que está construyendo Podemos «empieza a tener implantación social» y, aunque desde el escaño no se puedan tomar «decisiones trascendentales», sí pueden trasladar «las denuncias de los territorios que representamos y se puede recabar información útil para alimentar y mantener los movimientos sociales aquí».
FUENTE: EP