La Linderiella baetica, comúnmente conocida como gambilusa, es la protagonista de una importante iniciativa de conservación en Puerto Real. Este pequeño crustáceo, único en el mundo y parte del grupo de los «camarones duende», habita exclusivamente en charcas temporales de esta localidad gaditana.
Se considera un fósil viviente, con ancestros que datan de hace más de 300 millones de años, y su supervivencia está en peligro debido a la desaparición de su hábitat natural.
Hace 17 años, la Linderiella baetica fue descubierta como una nueva especie para la ciencia, lo que impulsó a la Sociedad Gaditana de Historia Natural a lanzar un proyecto de conservación para proteger tanto a esta especie como a sus charcas. Ante la venta de la parcela de Entrevías, donde reside la gambilusa, el Ayuntamiento de Puerto Real ha puesto en marcha un proceso pionero para salvarla.
Este esfuerzo se centra en trasladar los sedimentos que contienen sus huevos resistentes o quistes a un nuevo hábitat en el monte público Fuente de la Zarza, buscando crear condiciones óptimas para su conservación a largo plazo.
Aunque se han realizado intentos previos para trasladar a la gambilusa, estos no han dado los resultados esperados. Sin embargo, este nuevo proyecto se realiza con mayor volumen de sedimentos, lo que podría asegurar la creación de una población viable y duradera en charcas temporales artificiales. Se trata de un paso clave para garantizar la supervivencia de esta especie tan particular y única en el planeta.