Todo está preparado para que este Jueves, según cuentan medios nacionales, Navantia firme con la Armada de Arabia Saudí un contrato que tiene ya dos años de retraso. Se trata de las ya conocidas Corbetas para la Armada Saudí y que tienen un valor de 2.000 millones de euros para la empresa pública de la SEPI.
El compromiso lo oficializará el Príncipe Heredero Saudí, Mohamad Bin Salman en el Palacio de la Moncloa, donde será recibido por el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y tras asistir a un almuerzo con los Reyes en el Palacio de La Zarzuela.
Esto supondrá un acuerdo del que derivarán tres contratos entre los Astilleros Españoles y la sociedad SAMI (Industrias Militares de Arabia Saudí). Estos acuerdos incluyen la construcción de las corbetas, que son similares a las ya construidas para la Armada de Venezuela (Modelo Avante 2200); una colaboración en un centro naval en el puerto de Yedá, donde se instalará la armada saudí; y la formación y adiestramiento de la tropa destinada a llevar los buques.
Se estima que 600 militares saudíes recibirán la formación por parte de las Fuerzas Armadas de España en San Fernando, con un contrato que también afectará a los astilleros de la Bahía de Cádiz y de Ferrol, así como a su industria auxiliar.
La operación de Navantia se cierra tras las intensas negociaciones del Gobierno y la Casa Real con Riad y supone el contrato más importante en la historia de Navantia. Felipe VI se desplazó en el 2017 para intensificar las negociaciones y el rey emérito preparó la visita de Bin Salman en su reciente viaje a Arabia Saudí.