Cerca de 500 extrabajadores de Delphi siguen sin encontrar un empleo casi ocho años después del cierre de la planta de la multinacional en Puerto Real.
Los cerca de 500 extrabajadores de Delphi que siguen sin encontrar un puesto de trabajo, casi ocho años después del cierre de la planta de la multinacional en Puerto Real (Cádiz), cumplen mañana un año de encierro, en una movilización con la que no han logrado atisbar ninguna nueva expectativa.
Desde que comenzara el encierro, el 27 de enero de 2014, los exoperarios de Delphi que aún no han encontrado trabajo se turnan en grupos para mantener esta movilización, una forma más de reclamar a la Junta que cumpla el protocolo que firmó con ellos cuando cerró la factoría y prometió que buscaría una salida laboral para los 1.650 operarios que se quedaron en la calle.
El encierro se mantiene las 24 horas al día en el edificio «Sindicatos» de Cádiz, dentro de una movilización con la que quieren poner de manifiesto la «desesperación» de la mayoría de ellos, que han agotado todo tipo de prestaciones y ayudas y dicen estar viviendo situaciones dramáticas, según ha explicado a EFE Mario Bocanegra, uno de ellos.
Con una jornada de convivencia en la que participará el secretario general del SAT, Diego Cañamero, los exDelphis conmemorarán mañana este año de encierro, poco después de haber recibido un «mazazo» para sus reivindicaciones.
Y es que el pasado 14 de enero el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Cádiz autorizó la demolición y el desmantelamiento total de las construcciones e instalaciones que la empresa de automoción Delphi tenía en el Polígono Industrial El Trocadero de Puerto Real, un paso solicitado por la administración concursal y que viene a confirmar las escasas esperanzas que ya quedan para estos inmuebles.
La Junta, los partidos (PP y PA) , el Ayuntamiento de Puertos Real y los sindicatos han rechazado este derribo de unas instalaciones, que, según se ha cifrado, tienen un valor de mercado que superan los 22 millones de euros.
En un comunicado hecho público hoy los cuatros sindicatos representantes del colectivo de Delphi (UGT, USO, CCOO, CGT) recuerdan que estas naves son «el eje central» del protocolo firmado en su día con la Junta de Andalucía.
Los sindicatos han anunciado ya su intención de agotar «la vía jurídica» y hacer «un frente común» para evitarlos.
También parecen haber hecho un frente común en las demandas que UGT y USO interpusieron ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía para acusar al gobierno andaluz de incumplir el protocolo que firmaron, una iniciativa a la CCOO y CGT se unirán.
Las demandas «siguen su curso» y los sindicatos esperan que el TSJA «no demore mucho un pronunciamiento sobre esta causa».
Mientras los sindicatos siguen estas vías, los ex-operarios de Delphi aseguran que continuarán con su encierro.
Bocanegra ha explicado a EFE que una de las razones de que la movilización sea este encierro es que la mayoría de los ex operarios ya no pueden ni pagarse desplazamientos.
«Yo tengo ahora una ayuda familiar de 426 euros, pero muchos no tienen ni eso», explica este exDelphi que cuenta que desde hace casi ocho años manda «todos los días quince currículum» en busca de una oportunidad laboral que cada día ve más lejana: «Si con 45 años me costaba, ahora con 52 años mucho más».
Bocanegra lamenta para buena parte de la opinión pública este colectivo ha sido «unos privilegiados, unos parados de primera» por la cantidad de dinero que la Junta de Andalucía ha invertido en formación y ayudas para ellos y que, para estos casi 500 desempleados, no ha servido para lograr su objetivo, un puesto de trabajo.
Como en otras ocasiones los operarios harán mañana una nueva recogida de alimentos.
Y es que, según explica este exoperario, los fondos con que cuentan para sus movilizaciones son cada vez difíciles de reunir.
Una de las últimas aportaciones, cuenta, fue el «sobrante» del sueldo de europarlamentaria que mensualmente la candidata de Podemos a la Junta de Andalucía entrega a una organización social.
FUENTE: EFE
