Alrededor de una veintena de empresas de los Polígonos El Trocadero y Río San Pedro han dicho basta ya. Los empresarios de ambos centros empresariales han enviado un comunicado a los distintos medios de comunicación donde han mostrado una situación que «soportamos desde bastantes años». Todo ello para recabar apoyos para iniciar un proceso de reclamación con respecto a la que consideran «disparatada y disparada factura que emite GEN bimensualmente por consumo de aguas más diversos cánones de retirada y tratamiento de residuos a las empresas situadas en los distintos Polígonos Industriales de Puerto Real». Una factura que, «además de verse incrementada por la famosa tasa consorcial, también ha aumentado con la aplicación del tipo impositivo (IVA) al canon de retirada», que según los mismos hasta ahora estaba exento.
Algunas de las empresas confirman que han pagado hasta 1.600€ como parte de unos servicios bimensuales que no tienen en los polígonos, con algunos empresarios incluso afirmando que la limpieza de las aceras y alcorques, en muchas ocasiones, corre de su parte para proteger la imagen de su empresa. «Nos consumimos asumiendo gastos leoninos que repercuten directamente en nuestra capacidad de supervivencia y, por consiguiente, en la posibilidad de crear empleo. Asumir estos disparatados cánones no nos hacen competitivos», señalan.
Sin servicios, contenedores inexistentes, señales rotas. La preocupación entre los empresarios es máxima, dado que la imagen de los polígonos es la que se llevan las diferentes empresas que van a trabajar con las que tienen sede en la Villa.
La carencia de servicios en los distintos polígonos industriales de Puerto Real ha provocado que aflore, además de pagar los distintos impuestos, también la labor que realizan muchas empresas de reciclado de residuos peligrosos o especiales. Algunos, por Ley, deben hacerlo a empresas especializadas, lo que aumenta el gasto a la hora de deshacerse de todos los residuos que generan.
«Se nos llenan las manos y las bocas escribiendo y hablando de la necesidad de cuidar nuestro músculo industrial cada vez más endeble, pero la realidad es que, en la situación excepcional que estamos viviendo, en plena pandemia, y dentro de una de las ya habituales crisis de carga de trabajo que solemos soportar en este rincón del mundo y sin perspectiva futura de que la haya a corto o medio plazo, nos consumimos asumiendo gastos leoninos que repercuten directamente en nuestra capacidad de supervivencia y, por consiguiente, en la posibilidad de crear empleo. Asumir estos disparatados cánones no nos hacen competitivos. A lo mejor seremos conscientes cuando sólo queden naves vacías», indican.
Una situación que ya se ha vuelto insostenible, y es por ello que algunos empresarios han puesto distintas reclamaciones tanto a la empresa GEN como al Ayuntamiento de Puerto Real sin que se haya obtenido respuesta.