El delegado de la Junta de Andalucía en Cádiz, Fernando López Gil, ha lamentado la situación de los extrabajadores de Delphi, a algunos de los cuales el SEPE ha comenzado aplicarles la suspensión cautelar de las prestaciones, y ha añadido que quien debe dar explicaciones es el Gobierno.
Así lo ha indicado López Gil a pregunta de los periodistas sobre la medida que, tras el auto del Juzgado de los Social número 3 de Cádiz –uno de los tres que llevan los 420 casos por la supuesta simulación de contratos laborales cuando recibían formación– el SEPE ha comenzado a aplicar a algunos de los afectados.
El delegado de la Junta en Cádiz ha lamentado «enormemente» la situación de los trabajadores, «porque entiendo que para ellos es un enorme problema personal».
En cuanto a los autos, López Gil ha señalado que respeta las sentencias judiciales, «aunque en este caso no las compartas», ya que ha recordado que no ocurre lo mismo en otros dos juzgados, que están optando por no aplicar las medidas cautelares solicitadas por el SEPE.
Finalmente, el delegado de la Junta en Cádiz ha asegurado que es al Gobierno central al que «le corresponde dar explicaciones y preguntarle por qué estamos en esta situación», ya que «fue el que inició esa inspección y terminó en esta situación».
