El Pabellón Municipal volvió a repetir en la tarde del jueves una estampa bastante habitual los días de lluvia: parte de la actividad quedó suspendida por las goteras.
Las precipitaciones que han caído en la localidad, muy débiles durante la semana y con presencia notable el jueves, volvieron a hacer mella en las instalaciones deportivas, en este caso en el Pabellón Municipal, que presentó un aspecto inaudito en cuanto a su habitual actividad.
Baloncesto, gimnasia rítmica y fútbol sala se han vuelto a ver afectados debido al estado de las tres pistas de la instalación, con presencia de goteras en diferentes puntos con el consiguiente peligro para los usuarios, en un suelo mojado y resbaladizo.
A pesar de la labor de los operarios, intentando mitigar el agua con cubos y toallas, el estado general de la misma era impracticable para realizar cualquier actividad deportiva.
Las goteras, una tarea pendiente desde hace años en el Pabellón Municipal, forman parte de una lista de deterioros en la instalación a la que se le suma el estado de la grada superior y pasillo de vestuarios, entre otros.