La Semana Santa, como todo, también sufre la evolución y el progreso que la propia sociedad le imprime. Pero hay rescoldos que se mantienen en la pureza y esencia de lo que siempre fue esta celebración.
Muestra de ello fue en la pasada noche la estación penitencial de la Hermandad de «La Borriquita» con su cotitular el Santísimo Cristo del Perdón y la Misericordia.
Silencio, oscuridad, grandes nubes de incienso, y de fondo entremezclados los acordes de la capilla musical que antecedía al paso del Señor Lasaliano con los rezos y oraciones de un muy nutrido grupo de personas que durante el recorrido acompañaron al Señor rezando el Vía Crucis.
La Hermandad transcurrió con exquisita sobriedad y orden, rememorando esa pureza de tiempos pasados donde las bandas de música casi no existían y el pueblo acompañana a las imagenes rezando y en oración.
Nota destacable es que por primera vez, la Hermandad realizó estación de penitencia al completo en el interior de la Parroquia de San Benito aba, quedando sólo el paso fuera, a ras del dintel de la puerta, mientras todos los hermanos que acompañaban al Señor, pasaban ante el altar del templo donde el Santísimo Sacramento expuesto, recibía los rezos de los cofrades lasalianos.