Izquierda Unida de Puerto Real propone avanzar en el derecho a los suministros básicos, para ello se establecerá un mínimo garantizado de suministro de agua y electricidad a las familias en situación de emergencia, en la consideración de que no debe tratarse de una obra de caridad sino del acceso a un derecho básico y vital.
Izquierda Unida de Puerto Real, plantea que el acceso a los suministros básicos de agua y energía no puede quedar a la voluntad de las empresas ni considerarse una concesión graciable, sino que se trata de un derecho básico.
Por una parte, las grandes empresas distribuidoras que obtienen enormes beneficios tendrían que justificar su función social prestándose al servicio de las necesidades humanas más perentorias, y podrían hacerlo sin que por ello vayan a perder un margen de beneficios razonable. Por otra parte, aquellas empresas que son públicas o que tienen participación pública, ya deberían establecer los canales estables para hacer frente a esta prestación en caso de necesidad en casos justificados.
En Puerto Real, no existe obstáculo alguno para que esta política social pueda realizarse desde las empresas municipales que gestionan los suministros.
No se trata de abrir barra libre para el consumo indiscriminado. El agua es un bien que hay que cuidar, pero es un bien necesario para la vida y un derecho de los más básicos. Se trata de establecer un sistema de mínimos según la composición de las unidades familiares que estaría exento pago si se justifica por el estado de necesidad. A partir de ese mínimo las tarifas habrán de ser progresivas de manera que se incentive el uso razonable y se penalice el exceso.
La diferencia entre esta propuesta y el hecho de que se “perdonen” los recibos es que avanzamos en la consideración del derecho de las familias a acceder a los mínimos vitales.
FUENTE: Izquierda Unida Puerto Real