La Policía Local de Puerto Real realizó, en la madrugada del pasado jueves al viernes, controles de documentación y alcoholemia en la rotonda de entrada al municipio por la barriada de las 512 Viviendas.
Los agentes de las fuerzas de seguridad local realizaron un total de 18 pruebas de alcoholemias de las cuales tres conductores dieron positivo siendo estos denunciados por vía administrativas, siendo inmovilizados los vehículos. Asimismo fueron denunciados dos conductores extranjeros por circular con autorizaciones administrativas no validas en España, así como otros dos vehículos por tener la ITV caducada.
Lo más curioso, según detallan en su comunicado, es que se hizo constar a un conductor que «intentó eludir el someterse a la prueba de alcoholemia alegando que se dirigía a un centro médico porque a su pareja la había pinchado en un local de ocio del Puerto de Santa María y se encontraba mal».
Cuando la pareja de este individuo observó que se requirió a los servicios sanitarios, reconoció que no era cierto lo manifestado por el conductor, por lo que se procedió a anular el requerimiento de asistencia sanitaria, y este conductor tras dar positivo en alcoholemia y ser denunciado por ello, fue también denunciado por infracción a la Ley Orgánica 4/2015.