Del 2 al 11 de octubre en el Centro Cultural Iglesia San José, estará expuesta la Exposición «Víctimas de la represión franquista en Andalucía», organizada por el Ateneo Republicano de Puerto con la colaboración del Ayuntamiento de Puerto Real y la Junta de Andalucía.
Esta exposición pretende mostrar de forma amena al tiempo que rigurosa el proceso histórico que conduce desde los intentos reformadores de la Segunda República y el pronunciamiento militar que ocasionó la guerra civil, hasta la lucha colectiva por las libertades que condujo a la actual democracia y a la consecución del Estatuto de Autonomía andaluz, centrando buena parte de su atención en las actuaciones represivas del franquismo, que dejaron miles de víctimas y desaparecidos y abrieron heridas que solo se cerrarán realmente cuando se conozca toda la verdad, único objetivo al que sirve y se debe la presente muestra.
En sentido amplio y extenso, puede afirmarse que la inmensa mayoría de los hombres y mujeres que vivieron en Andalucía desde el 18 de julio de 1936 hasta el final de la década de los 70 fueron de un modo o de otro víctimas de la guerra y la dictadura franquista, incluidos muchos de los llamados vencedores. La falta de libertades, la conculcación cotidiana de los más elementales derechos humanos, la asfixia intelectual y el oscurantismo ideológico, la persecución laboral y la exclusión social, junto con la regresión de las relaciones de género a posiciones casi medievales, definen un escenario social y político que durante 40 años arrebató a los miembros de la sociedad andaluza y española su condición de ciudadanos.
A lo largo de 20 paneles, con predominio de imágenes y gráficos apoyados en breves textos que ofrecen de modo sintético la necesaria información histórica, se despliegan ante nosotros las claves sociales de esa trágica etapa de brutal represión pero también de prolongada resistencia organizada desde la clandestinidad no solo por partidos y sindicatos, sino por la sociedad civil articulada en el movimiento estudiantil, intelectual y ciudadano. Por ello, la mirada sobre el periodo no es negativa ni trágica, sino positiva y esperanzada, reafirmando para las nuevas generaciones la posibilidad de construir una sociedad mejor y más justa mediante la organización y el compromiso.
FUENTE: Ayto. de Puerto Real