El Pleno Extraordinario y Urgente convocado este lunes en el Ayuntamiento de Puerto Real ha servido para aprobar por unanimidad la inyección de 100.000 euros por parte del Consistorio a la Empresa Pública de Suelo y Vivienda de Puerto Real, EPSUVI.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
Nueva sesión del Pleno Extraordinario y Urgente a celebrar en el Ayuntamiento de Puerto Real en la mañana de este lunes, 21 de Noviembre, y que sirvió para tratar dos asuntos, uno de ellos referente a la Empresa Pública de Suelo y Vivienda de Puerto Real, EPSUVI.
Punto 1º: Ratificación de la Urgencia de la Convocatoria
Punto 2º: Modificación Presupuestaria Nº46/2016 de crédito extraordinario, por importe de 100.000 euros.
El punto principal de la mañana estaba en la petición de crédito para que el Ayuntamiento inyectara 100.000€ a la EPSUVI. Esta cantidad, tal y como ha explicado el alcalde, Antonio Romero, en el Pleno, tiene como único fin poder hacer una transferencia a la Empresa Pública de Vivienda Epsuvi.
El Ayuntamiento se ha visto obligado a adoptar esta medida extraordinaria ante la falta de liquidez en la que se encuentra la empresa, que ha desembocado en impago de nóminas a los trabajadores y una enorme deuda de los alquileres de realojo y con infinidad de proveedores, siendo éstos los principales, pero no los únicos, débitos de la Epsuvi.
El precario estado de la empresa no es nuevo y se remonta a los tiempos de la burbuja inmobiliaria: la operación fallida de Entrevías con la empresa Altarea y una histórica mala gestión han provocado la paupérrima situación de la sociedad de capital 100% municipal.
Si bien es cierto que los problemas más graves corresponden a los gobiernos de José Antonio Barroso, también lo es que en la pasada legislatura no se hizo absolutamente nada para resolver la situación de la empresa, ni siquiera aprobar las cuentas. De hecho, los ejercicios de 2013 y 2014 aún se encuentran sin aprobar, y el equipo de gobierno actual está intentando dar solución a este problema: “es uno de los trabajos más ingratos que hemos tenido que asumir”, asegura Iván Canca, teniente de alcalde de Urbanismo.
Para aprobar estas cuentas, se está intentando depurar una supuesta deuda que el Ayuntamiento tiene sobre el papel con Epsuvi por valor de 15 millones de euros. Aclarar esta cuestión resulta un farragoso proceso que está llevando meses y que debería haberse realizado hace años, aunque nadie asumió su responsabilidad.
Iván Canca asegura que “el principal grupo de la oposición, del ya desparecido Partido Andalucista, en sus años de gobierno hizo el avestruz con la Epsuvi, escondió la cabeza y no hizo nada, no sabemos si a la espera de que los problemas se resolvieran solos o por obra del espíritu santo. Eso sí, desde Epsuvi se gestionaron pagos al extinto periódico Noticias Locales para su autombo, ascendiendo el gasto, que compartía con la otra empresa, GEN, a 200.000 euros”.
Actualmente se da la lamentable paradoja de que la empresa editora de ese periódico tiene denunciado a Epsuvi por impago, lo que refleja la falta de ética y la inoperancia del anterior equipo de gobierno, capaz de generar este caos sin inmutarse.
“Maribel Peinado y Jesús Plaza bien podrían al menos mediar para solicitar una rebaja a esa empresa, y así aunque fuera en una sola ocasión podrían trabajar para mejorar la situación del Ayuntamiento, y no para arruinarla”, concluye Canca.
Punto 3º: Propuesta de la portavoz del Grupo Municipal, Sí Se Puede Puerto Real, Sra. Sánchez Caro, en relación con las denuncias de la Coordinadora de Profesionales del Metal (CPM) de la Bahía de Cádiz por la situación de las empresas auxiliares de Navantia, y condena por el despido de un trabajador de la empresa Montubesur.
Antes de la propuesta leída por la 1ª Teniente de Alcalde, el trabajador despedido tomó la palabra para expresar la situación por la que están pasando tanto él como varios compañeros, «exigimos solo lo que es justo, una Navantia 100% pública que garantice la contratación directa desde la casa, el cumplimiento íntegro del convenio e implantar el trabajo a turnos y una bolsa de empleo controlada por los trabajadores que acabe con las represalias, los castigos y los favoritismos».
Acto seguido, Mayte Sánchez leyó la propuesta donde relataba la situación del trabajador y el «despido encubierto» por «represalias» desde la empresa, instando al Plenario Municipal al voto favorable hacia la causa expuesta anteriormente por el trabajador afectado.
Elena Amaya, portavoz del Grupo Municipal Socialista, explicó la abstención que iban a tomar desde su formación «por no estar suficientemente acreditada», comprometiéndose a presentar una iniciativa en el próximo Pleno «que recoja el problema generalizado que está sufriendo el Sector Naval».
En la misma línea, Jesús Plaza por parte del Grupo Municipal Andalucista, comentó que no tenían «juicios suficientes para posicionarnos sobre este tema con absoluta claridad», pidiendo adherirse a la posible propuesta del Grupo Municipal Socialista.
Camino similar tomaron José Alfaro, de Izquierda Unida, y Andrés Rodríguez, pidiendo encabezar la propuesta y dar traslado de ella al Comité de Empresa de Navantia y de las empresas del Metal.
Antonio Romero contó los contactos tanto con los trabajadores como con la Dirección y Comité de Empresa de la Factoría, y tras un pequeño receso, Tomás Sánchez propuso al Plenario «mantener por una parte la propuesta presentada, ya que se trata de una específica de apoyo, y abrir una vía nueva de trabajo solicitando cartas de responsabilidad social a todas las empresas de la Bahía con vistas a que en los convenios de contratación que tengan las Administraciones Públicas consten una serie de medidas que eviten que de cara al futuro que puedan utilizarse los despidos como formas de represalias».
La propuesta fue aprobada por los miembros del Equipo de Gobierno y la abstención del resto de la Sala; y tras 32 minutos se levantó esta sesión extraordinaria del mes de noviembre en el Pleno Municipal.
