La portavoz de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, ha participado en la movilización convocada este sábado contra las detenciones y «represión» tras las protestas del metal en Cádiz, que ha reunido a alrededor de 5.000 personas según la organización, y se ha comprometido a «no consentir» que se tome como «cabeza de turco» a los arrestados.
En declaraciones a los medios, Rodríguez ha criticado que «la voluntad de la operación policial no es hacer justicia, sino asustar a la gente». «No es posible que se detenga y judicialice un conflicto social. Es imposible saber todo el que dio un empujón a un contenedor, el que estuvo en un piquete o todo el que bloqueó una vía de comunicación… Es imposible», ha remarcado la portavoz de Adelante.
En esa línea, Rodríguez ha insistido en que la «finalidad es meramente política, la de asustar», por lo que ha pedido al Gobierno central que se «implique» y «no mande más tanquetas, ni más antidisturbios ni más policías de la Brigada de Investigación para reprender» a los que participaron en las movilizaciones. «Le pedimos al Gobierno que mande más carga de trabajo e inspectores para que se cumplan los convenios que peleamos», ha exigido Rodríguez.
La movilización, convocada por la confluencia de sindicatos alternativos de Cádiz, ha partido de los astilleros de la capital gaditana y ha terminado en la sede de la Subdelegación del Gobierno. A ella, se han sumado medio centenar de trabajadores del sector de la Atención Domiciliaria que participan en la marcha blanca andaluza del sindicato CGT en defensa del Servicio de Atención Domiciliaria (SAD), que arrancó la semana pasada en Almería, con la primera de sus 14 etapas para recorrer todas las provincias andaluzas en demanda de que este servicio deje de estar «privatizado» mediante concesiones administrativas y sea plenamente «municipalizado».
FUENTE: EP / FOTOGRAFÍA: CGT