El Ayuntamiento de Puerto Real, a través de la delegación de Medio Ambiente que encabeza la concejala Virginia Mena, ha llevado a cabo una jornada de reforestación en el Pinar de Casines junto con el alumnado de 5 años del colegio “Tierra y Libertad”.
Compromiso con la conservación ambiental
La actividad tuvo como objetivo la plantación de diferentes especies arbóreas para reponer los ejemplares que han sido retirados debido al deterioro causado por el tomicus, un insecto que afecta a los pinos, así como por los efectos de la sequía y los recientes temporales de viento y lluvia.
Para garantizar el mantenimiento del entorno, el alumnado plantó pinos piñoneros donados por el vecino Antonio González Ortiz, además de acebuches, algarrobos y encinas provenientes del Vivero Municipal. La concejala Virginia Mena destacó que esta acción es clave para conservar la masa forestal y proteger el suelo del pinar, una zona verde que sirve como lugar de esparcimiento para muchas familias de la localidad.
Una acción comunitaria
La actividad contó con la participación del personal de educación ambiental del ayuntamiento, los jardineros municipales, niños, niñas y sus familias, quienes colaboraron activamente en la plantación. Mena agradeció al colegio y a las familias por su implicación y resaltó que estas iniciativas no solo reforestan el entorno, sino que también generan una mayor conciencia sobre la importancia de cuidarlo.
“Las familias que disfrutan habitualmente de este entorno se han convertido en sus mejores aliadas para su cuidado y conservación”, señaló la concejala.
La importancia de actuar ante las amenazas
El Pinar de Casines, visitado a diario por residentes para pasear y disfrutar de la naturaleza, ha sufrido en los últimos meses el impacto de factores climáticos adversos y la pérdida de ejemplares por plagas, lo que ha requerido una intervención urgente. Esta reforestación, aprovechando la temporada de lluvias, busca garantizar que los nuevos árboles se afiancen y contribuyan a la recuperación del ecosistema.
Esta actividad demuestra el compromiso del Ayuntamiento de Puerto Real con la protección del medio ambiente y la implicación de la comunidad local en preservar sus espacios naturales para las generaciones futuras.