Iván Canca nos escribe un artículo para nuestra sección de “Tu Opinión”. Si queréis hacer como él, podéis escribirnos, con vuestros datos, a redaccion@puertorealhoy.es.
La pasada semana se aprobó la declaración de la imagen de Jesús Nazareno como Regidor Perpetuo de Puerto Real.
Ante todo, y que quede claro, no tengo absolutamente nada en contra de las creencias o la religión de cada persona. Por lo que no quiero que se malinterprete mi postura. Este artículo no es un ataque a las creencias de los cofrades. Es más, hay que valorar positivamente la labor solidaria que hacen en muchas ocasiones.
Tengo amigos y familia en este mundo y desde el respeto sólo quiero que entiendan que su imagen no tiene porqué ser la imagen del resto de puertorrealeños. Y que una institución como el Ayuntamiento debe quedar al margen de toda creencia religiosa. Porque debe representar por igual a toda la ciudadanía independientemente de su credo.
Pero si la petición de los cofrades me parece ilegítima, su fervor religioso les lleva a pedirla con entusiasmo. Cosa que puede ser hasta entendible aunque no la comparta. Lo que de ninguna manera puede entrarme en la cabeza es que unos políticos que encima presumen ser de izquierdas vendan la imparcialidad de la institución por un puñado de votos. Socialistas y andalucistas, los responsables de este esperpento, saben perfectamente que su responsabilidad como políticos es velar por la aconfesionalidad de las instituciones. Y a pesar de ello se saltan a la torera sus obligaciones y se apuntan al carro del populismo. En una suerte de chantaje emocional a los cofrades, usan su pasión religiosa para tratar de mejorar su posición electoral. Son carroñeros del voto.
Es muy importante además recalcar lo que se indicaba en el informe de la Secretaría General sobre este expediente: «Nadie puede ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias (art. 16.2 de la C.E.), lo que dejaría a los concejales expuestos ante la citada votación plenaria». Es decir, al traer esa propuesta a pleno vulneraron los derechos fundamentales de los concejales recogidos en la Constitución.
Se abre un precedente peligroso. Mañana podría venir un colectivo que represente a cualquier religión minoritaria y pedir lo mismo. ¿Qué argumentos tendríamos para decirles que no? El PSOE es un partido que se jacta de defender a las minorías. Se discriminaría a esta minoría. La alcaldesa podría decirles algo así como «lo siento pero ustedes no dais tantos votos».
En el pleno de la pasada semana hubo grupos (Adelante, Cs y Verdes EQUO) que representaron a toda la ciudadanía puertorrealeña al margen de sus creencias, sabiendo que pueden perder votos pero con la conciencia muy tranquila. Y hubo otros grupos (PSOE y AxSí) que representaron la imposición de creencias a los demás y el populismo más torticero.
¿Cuántas veces habrá llamado populista a Kichi señora Amaya? Pues bienvenida al club.
Iván Canca