Las diputadas provinciales Isabel Armario y Elena Amaya han recibido a la expedición ‘Desafío Fernando’, que ha conseguido la proeza de completar el Camino de Santiago portando una cama adaptada, donde viajaba Fernando, quien probablemente se ha convertido en el primer peregrino que con parálisis cerebral y un 99% de discapacidad que ha conseguido llegar a la capital compostelana tras recorrer 140 kilómetros de Camino.
Cinco monitores han acompañado a Fernando para hacer realidad este hito. Anpehi y Asprodeme son las entidades que lo han organizado, con unos objetivos claros en pos de la normalización de la discapacidad. Por un lado, han querido hacer visible esta realidad tanto para aquellas personas que se han cruzado en el camino de Fernando durante esos días, así como a las audiencias de los medios de comunicación en los que se ha dado difusión al proyecto. En estos días han sido numerosas las publicaciones que se han hecho eco de las diferentes etapas de este recorrido. A los organizadores no les constan precedentes de alguien con este grado de discapacidad.
Armario y Amaya se han interesado por los pormenores de este recorrido, de 140 kilómetros, la acogida y muestras de apoyo de otros peregrinos que han conocido durante los días de aventura, y la propia respuesta de Fernando a este desafío, dentro de sus limitaciones de comunicación. Ambas diputadas han felicitado a Anpehi y Asprodeme por la iniciativa, y por el mensaje integrador que lanzan a toda la sociedad.
Desde Anpehi han destacado que se han conseguido satisfacer los principales retos que se plantaban, como la normalización de la discapacidad a través del deporte, recuperar valores, generar en Fernando mayor autoestima y autoconfianza, dar a conocer las dificultades a las que se enfrenta este colectivo, promocionar e impulsar el deporte adaptado y poner en valor el trabajo en equipo.
Desde el año 2016 se viene desarrollado este tipo de desafíos, con diferentes personas discapacitadas. Fernando es el cuarto beneficiario de esta iniciativa. El primer protagonista de este Desafío fue Mario, un joven de 14 años, con Espina Bífida y movilidad reducida. En 2017 fue el turno de Ana María que dio visibilidad al triple hándicap de las personas con discapacidad, del ámbito rural y mujer. Este año también Frank un joven con diversidad funcional ha podido ser protagonista de este reto.
FUENTE: Diputación de Cádiz