La factoría de Airbus en Puerto Real lleva desde las 7:00 h. en paro debido al despido de un trabajador el pasado viernes, 16 de Junio.
Según el sindicato CGT, el despido se debió «por tener la mala suerte de encontrarse enfermo. En efecto, la empresa justifica su despido en la aplicación del Art. 52 d) del Estatuto de los trabajadores, en concreto, por haber tenido bajas médicas en los 2 últimos meses que superan el 20% de su jornada».
Este despido que castiga la enfermedad es un atentado contra los trabajadores y CGT no va a consentir ningún despido en dichos términos. Este sindicato no entiende que la dirección de la empresa, como parte firmante del convenio colectivo, se salte su propio texto (art. 58 CC), y otros acuerdos de los comités de salud laboral, y en materia de disminución del absentismo, y materialice un despido sin previo aviso y sin tener en cuenta la situación personal del trabajador, de 57 años y más de 35 años de antigüedad en la empresa, con diversas patologías osteomusculares que le han llevado a una intervención quirúrgica, y de la que se encontraba en proceso de rehabilitación», añaden.
Un despido que provocó el ataque de ansiedad del trabajador en el momento de su comunicación, algo de lo que culpan desde la CGT a los responsables de Recursos Humanos y Director de la Planta.
Asimismo, desde la CGT señalan que este trabajador despedido forma parte de sus afiliados. Un Sindicato que formó parte junto al resto de la Confluencia Sindical de la huelga del metal en la Bahía de Cádiz que tuvo un amplio seguimiento justo el día anterior al despido.
«No queremos pensar de que se trate de algún tipo de represalia por la citada huelga, en cualquier caso viene a ser la ejemplificación de la precarización del sector que se denunciaba precisamente en la misma», prosigue en su comunicado.
«Si a los trabajadores fijos se les puede despedir simplemente por estar enfermos, ¿Qué no se podrá hacer con todos los demás?. Un ejemplo clarificador. Esa misma semana, fueron también despedidos 14 trabajadores de ETT que trabajaban en la planta de Airbus Puerto Real.
Precisamente el miércoles, cuando se conoció el despido de los compañeros de ETT se produjo un paro de toda la planta para exigir su readmisión. Este despido parece explicarse en ese contexto, ¿es que la empresa quiere tener un rehén para intentar evitar la exigencia de readmisión de los compañeros?», continuan.
Desde la CGT piensan «que esta actuación por parte de la dirección, es una nueva traición a toda la plantilla, incumpliendo sus propios acuerdos, con el único objeto de socavar la capacidad negociadora, para de esta manera reducir los derechos laborales que tanto esfuerzo se consiguieron, y con la única pretensión de tener una plantilla sumisa y con miedo».
«No toleraremos que se use a este compañero, ni a ningún otro, como moneda de cambio, o rehén para cualquier negociación, y exigimos su reincorporación inmediata antes de sentarnos en cualquier reunión», afirman.
«CGT usará todas las herramientas que tiene a su alcance para que esta situación se revierta y el compañero se reincorpore a su puesto de trabajo con total normalidad. Y solicita a las plantillas de todas las factorías apoyo mutuo y solidaridad, pedimos al resto de organizaciones, ser firmes en defensa de la readmisión del despedido», amenazan.
La reacción de los trabajadores de Puerto Real no se hizo esperar, y ese mismo viernes se celebró en la factoría una asamblea en paro con el acuerdo mayoritario, y unánime por parte del comité, de NO trabajar hasta que readmitan al trabajador despedido, hoy lunes se continúa en asamblea, con la plantilla en paro.
Apoyo del Ayuntamiento de Puerto Real
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Puerto Real ha querido hacer pública su total solidaridad y apoyo al trabajador de la plantilla de Airbus-Puerto Real despedido «injustamente» el pasado viernes por la empresa por ponerse enfermo.
Para el gobierno local «resulta intolerable que se pueda despedir a cualquier trabajador por padecer una enfermedad o lesión, estimando que lo más coherente sería su inmediata reincorporación».
Así las cosas, el ejecutivo puertorrealeño hace suya la lucha del trabajador despedido y muestra su total conformidad con la respuesta de los trabajadores de Puerto Real que el mismo viernes decidieron mayoritariamente en asamblea parar de trabajar en tanto en cuanto el compañero afectado no sea readmitido. Una decisión respaldada igualmente y de forma unánime por el comité.