Juan Fernández nos escribe un artículo para nuestra sección de “Tu Opinión”. Si queréis hacer como el, podéis escribirnos, con vuestros datos, a redaccion@puertorealhoy.es.
Sí, eso es lo que solicito, respuesta a varias preguntas . ¿Puede un taller estar dentro del casco Histórico de esta Villa y desarrollar su actividad? ¿Puede copar los aparcamiento públicos que quiera para realizar sus reparaciones ¿Puede ocupar cuando le venga en gana un paso peatones? ¿Puede un establecimiento poner mesas y sillas obstaculizando en parte la vía pública y el paso normal de los ciudadanos?
Todas estas preguntas me las realizo yo cada día cuando salgo a dar un paseo por la Real Villa.
Puedo entender que todos tengamos el derecho a comer de nuestro trabajo, pero lo que no puede ser es por esa razón entorpecer o apropiarse para su uso exclusivo de dicho negocio de elementos públicos que son de todos. Creo que cuando el Ayuntamiento da una licencia para el desarrollo de una actividad empresarial, este le exigirá una series de obligaciones, por ejemplo que los aparcamientos son de todos, que la utilización y obstrucción parcial o total de un paso de peatones no está permitida; que la eliminación de elementos nocivos (Aceites) para la salud deben ser recogidos y no en las aceras; que las basura de la calle se deben de limpiar cuando se termina la jornada y no esperar que venga el servicio de limpieza municipal para que la recojan. Ahora si las licencias se dan y después no se vigilan su cumplimiento por diversas razones, una de dejadez o amiguismo, esto lleva a algunos a la impunidad de utilizar los espacios de todos para su disfrute y su negocio importando poco si va en contra de lo colectivo.
Vemos últimamente, y con asiduidad, que algunos negocios se creen con el derecho a ocupar la calle bien sea por que les dejan (Ayuntamiento-Policía) o bien porque no hay una vigilancia efectiva, y si alguien protesta te toman como que quieres cargarse la poca vida empresarial que hay en Puerto Real, que no es culpa de los ciudadanos sino de otros condicionantes que no vienen al caso. Y el ejemplo lo tenemos en algunos talleres y bares que en base a no sé qué autoridad o razones les lleva a la ocupación casi total de una calle, de un paseo, o de un aparcamiento, pongo un ejemplo en este verano en el paseo marítimo llegando una hora ya fijada se produce tal acumulación de mesas y sillas en la parte de dichos bares que es difícil pasar, no solo a una persona sin dificultades si no a otras con dificultad reducida (sillas de ruedas) peor, y yo pregunto cuándo lo hacen alguien les ha dado permiso, pues yo he visto la policía en esos momentos no indicarles nada en contrario, o cuando un taller ocupa plazas de aparcamiento para reparar sus coche y ocupa parte de un paso de peatones para realizar sus reparaciones, si lo hace será porque tiene permiso de alguien y quisiera saber quién se lo ha dado.
Si seguimos, nos volvemos a encontrar que solo algunos empresarios tienen en Puerto Real patente de corso, un ejemplo en la Calle Ancha se cambiaron algunos árboles, ¿se han dado cuenta ustedes que solo han puesto nuevos en donde esta un negocio de un bar? ¡Qué casualidad!, las cosas o se explican bien o no se hacen, hay más ejemplos con tal que uno se de una vuelta por la calle más concurrida de Puerto Real y los obstáculos son visibles.
Los ciudadanos tenemos derecho a pasear y disfrutar de esta Real Villa pero hacerlo con comodidad y no realizando carrera de obstáculos o buscando aparcamientos lejos de casa porque alguien los tiene ocupado con su negocio.
Todo esto me lleva a plantear dos cuestiones aparte de las preguntas realizadas arriba de este artículo ¿cumple el Ayuntamiento su obligación de hacer cumplir las ordenanzas municipales? ¿Vigila el Ayuntamiento que dicho cumplimiento se realice o hace la vista gorda, aduciendo razones de índole laboral y social?